Esa es una serie de signos y síntomas comunes de la cetosis, ¡úsela como guía para que pueda saltear la lucha y obtener los resultados de una dieta ceto!

Una dieta cetogénica es una forma muy efectiva de perder grasa y mejorar la salud de muchas personas. El objetivo de la dieta es inducir al cuerpo a la cetosis, un interruptor metabólico con el cual el cuerpo puede quemar ácidos grasos en lugar de glucosa.

Ya hemos cubierto la configuración de macros cetogénicos, la importancia de incluir suplementos con electrolitos y consejos sobre cómo evitar la gripe cetogénica, como formas de lograr una cetosis exitosa y adaptarse a la grasa.

Antes de que puedas obtener todos los beneficios de una dieta cetogénica, debes entrar a la cetosis. Hay una serie de signos y síntomas comunes de la cetosis.

8 Síntomas de la Cetosis

Incremento medible de las cetonas

Puedes probar los niveles de cetonas a través de la orina, el aliento, o muestras de sangre. Técnicamente, un rango de 0,5-1,5 mmol/L se considera cetosis. Sin embargo, a no ser que sigas una dieta cetogénica por razones médicas (en cuyo caso deberías trabajar con un profesional médico) ¡no necesitas una prueba de tus cetonas!

Es mucho mejor adaptar la dieta a tu estilo de vida, sentirte nutrido y mantenido nutricionalmente en lugar de perseguir una cierta cantidad en un medido de cetona o estresarte por hacerte una prueba. En ocasiones, puede ser información interesante, pero en la mayoría de los casos, solo lleva a confusiones y complicaciones mayores.

Fatiga y debilidad a corto plazo

¡Este es uno de los mayores obstáculos para las personas que siguen la dieta cetogénica! Luego de toda una vida alimentando al cuerpo con carbohidratos, cambiar a la grasa puede ser un poco difícil para algunas personas. Tener algunos días con síntomas de fatiga y debilidad es muy común en la cetosis. En estos días estás en un «limbo», estás desacostumbrándote a los carbohidratos y acostumbrándote a utilizar la grasa como fuente de combustible para tu cuerpo.  Tu cuerpo debe trabajar para regular las enzimas y cuerpos cetónicos necesarios para procesar las grasas y obtener energía. Estás cerca, ¡no renuncies hasta que atravieses el proceso de cetosis!

Qué hacer: Verifica dos veces tus electrolitos, específicamente la sal y el magnesio. Adopta un enfoque de vida tranquilo y discreto por unos días. Comprende que esto es parte del proceso de adaptación y no presiones demasiado ni apliques una restricción de calorías estricta durante este período.

Irregularidades Digestivas

Adaptarte a la cetosis generalmente significa que estás cambiando muchos de los alimentos de tu dieta. Puedes atravesar un corto período de estreñimiento o diarrea, el sistema digestivo funciona para realizar los cambios necesarios para poder digerir más grasa.

Para facilitar la elección de alimentos, aprende qué debes y qué no debes comer en una dieta cetogénica y consulta nuestro libro de cocina para obtener recetas cetogénicas sencillas.

Qué hacer: Una forma específica de magnesio llamada citrato de magnesio actúa como un laxante suave y también servirá para equilibrar los electrolitos. Comienza con una dosis, y auméntala según sea necesario. Si la diarrea persiste, considera las sales de bilis o las enzimas para facilitar la digestión de los ácidos grasos.

Aliento Ceto

¡Agradece a los crecientes niveles de cetona por este síntoma! La acetona cetona se libera por vía oral y puede causar mal aliento o aliento afrutado en una dieta cetogénica.

Qué hacer: Lavarte la boca con un enjuague bucal o cepillarte los dientes varias veces al día puede ayudarte a controlar cualquier olor extraño mientras tu cuerpo se adapta. Cualquier desagrado se desvanecerá con el tiempo.

Calambres musculares y dolores de cabeza

La deshidratación y los desequilibrios de electrolitos pueden causar calambres musculares y dolores de cabeza. Estos son síntomas comunes de abstinencia después de eliminar el azúcar de nuestra dieta.

Qué hacer: Considera añadir a tu dieta suplementos con electrolitos. Consume de 2 a 3 cucharaditas de sal al día, más algo adicional durante períodos sudoración intensa. Toma 400 mg de glicinato de magnesio 2-3 veces al día.

Poco apetito

Los macros de proteínas y grasas son inherentemente muy saciantes, esto hace que la dieta cetogénica sea útil para reducir el hambre y ayudar a las personas a comer menos calorías sin sentirse deprimidas. El estado de cetosis está regulado por nutrientes mediadores del apetito que influyen en las hormonas de manera diferente a los carbohidratos^1,. Mantener estable el nivel de azúcar en la sangre a través de la restricción de carbohidratos también tiene un impacto beneficioso en las hormonas del hambre. Finalmente, las cetonas por sí mismas pueden tener un papel en reducir el apetito neurológicamente², y son una fuente de energía más eficiente que el azúcar, lo cual contribuye aún más a la supresión del apetito.

Qué hacer:Aprovecha la poca hambre cuando esta ataque. Apunta siempre a tu requerimiento diario mínimo de proteínas y ajusta la grasa de acuerdo al hambre. Si tienes poca hambre, come menos grasa. ¡Si consumes menos grasa dietética, tu cuerpo quema más grasa!

Incremento de enfoque y energía

La baja energía puede ser uno de los primeros síntomas de la cetosis, pero a menudo se produce un aumento repentino de la energía. A medida que el cuerpo se adapta para quemar grasa en lugar de glucosa para obtener energía, necesitarás cada vez menos azúcar, lo que permitirá que tus niveles de azúcar en la sangre se estabilicen. No experimentarás fluctuaciones drásticas en la glucosa e insulina en la sangre y podrás omitir la siesta de la tarde.

No te desanimes si primero experimentas fatiga o la gripe cetogénica en una dieta cetogénica. Nuestros cuerpos necesitan producir cetonas constantemente para que podamos sentir realmente los beneficios mentales de la adaptación a la grasa. Las personas que practican la dieta cetogénica a largo plazo desarrollan una mayor claridad y mejoras en la función cognitiva, lo cual se alinea por completo a los numerosos estudios que demuestran que las cetonas tienen efectos terapéuticos para las enfermedades cerebrales, las conmociones cerebrales y la pérdida de memoria ^3,4,5. El cambio puede demorar unos días y hasta unas pocas semanas para que alcances tu máximo potencial de cetonas. Algunos notan cambios sutiles que continúan durante muchos meses a medida que continúan ajustándose a su dieta y estilo de vida cetogénico.

Pérdida de peso

Este es, por mucho, uno de los beneficios más populares de una dieta cetogénica. La primera gran pérdida de peso ocurre después de comenzar una dieta cetogénica cuando la restricción de carbohidratos provoca la liberación de peso de agua superfluo. La pérdida rápida de peso es un síntoma claro de la cetosis, algunas de las personas que experimentan la dieta cetogénica pueden notar una pérdida de peso significativa durante una noche.

Una y otra vez, la dieta cetogénica ha demostrado ser efectiva en la pérdida de grasa a corto y largo plazo^6,. Para continuar perdiendo grasa corporal constantemente, ajusta tus macros y apégate a la dieta. Se necesita tiempo para ganar peso y también se necesitará tiempo para perderlo.

En conclusión

Hay varios síntomas claros de la cetosis y signos de que tu cuerpo se está adaptando a un metabolismo cetótico. Algunos no son tan agradables como otros, pero por lo general no duran más de unas pocas semanas.

¡Todos somos diferentes, algunos de nosotros tendremos una transición muy suave y nunca experimentaremos ningún síntoma negativo de la cetosis!

¿Listo para comenzar?

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^{1. https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/23632752↩ 2. http://onlinelibrary.wiley.com/doi/10.1111/obr.12230/full↩ 3. https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/18625458↩ 4. https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/24721741↩ 5. https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/15123336↩ 6. https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/17971178↩ 7. https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/23651522↩}